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jueves, 15 de mayo de 2008

Antes del día de las madres


Que cosas raras le pasan a uno debido a la construcción social de lo que es bueno, correcto y debido. Se acercaba el día de las madres y los participantes del lugar donde trabajo, en su inocencia, o quizás basando su pregunta en lo que creen correcto, me comentaron, ¿usted ya es madre? o me decían felicidades.
Yo, les contestaba... no, aún no soy madre. Era preciso ver su reacción, sorpresa, incredulidad...

Yo, pensando en que su pregunta se basaba en que ver a una mujer joven, es equivalente a que esta casada, tiene hijos. Les comentaba que aún no tenía hijos, porque apenas tenía 25 años y que todavía hay tiempo. Ellos me decían, si, pero por lo menos tiene a alguien, porque no es bueno estar solita.

Independientemente de una cosa o la otra, y de cual sea mi estatus, hasta que punto la norma social en la que se vive dirige y determina nuestra forma de vivir. Hasta que punto, nos volvemos simplemente en fichas que transmitimos toda una carga incorrecta de creencias.

Definitivamente, algún día quiero ser madre, tener una familia, pero ese momento no lo determinará nadie.

Solo pienso que se debe tener cuidado con el acercamiento que le damos a las cosas, porque en un país donde la salud mental esta por el suelo, es de importancia tener presente que hay mujeres que una pregunta como la que me hicieron a mi, las puede poner a pensar "me quede jamona". Y eso, de un manera u otra afecta e influye en la autoestima de ellas.

Soy feliz, no tengo hijos, pero tengo una madre y una abuela por las cuales le doy gracias a Dios. Además, hay que aprender a disfrutar de cada etapa que trae la vida.

¿Cuantas veces inconscientemente, sin percatarnos o de manera inocente, las pautas sociales son las que determinan nuestro rumbo a seguir por la vida?

2 comentarios:

... dijo...

Gladys: Comparto contigo en el pensar sobre el tema. Soy hombre de 25 años soltero y sin hijos. A menudo la gente me pregunta; “¿cuando te vas a casar o tener hijos?” Ya lo tomo "normal", y simplemente “picheo” la pregunta contestando con una sonrisa y diciendo “un día de estos”, pero estas situaciones podrían muy bien herir la autoestima de las personas.

¿Qué saben ellos…? ¿Qué saben ellos si soy es estéril? ¿Qué saben de mis preferencias sexuales? ¿Qué saben ellos de mis creencias personales, de mis convicciones religiosas, si podría ser una persona célibe consagrada a Dios? ¿Qué saben ellos de la soledad con que pudiera vivir? ¿Qué saben ellos de las fobias al compromiso que pudiera tener? ¿Qué saben ellos lo que yo elijo para mí y el momento en que tomo mis decisiones? ¿Qué saben ellos...? ¿Qué les enseñaron sus padres? ¿Qué les enseñaran a sus hijos…?

Jerry

Glarys dijo...

Exacto, ese es el punto, que la realidad es que la gente no tiene noción del alcanze de sus comentarios y mucho menos de las razones y particularidades de cada quien. Excelente pregunta ¿qué saben ellos?